¿QUÉ ES?
La procesionaria es una oruga muy peligrosa para nuestras mascotas, ya que están cubiertas de pelos urticantes y segregan una toxina llamada Thaumatopina.
CONSECUENCIAS DEL CONTACTO DE NUESTRO PERRO CON LA PROCESIONARIA:
- Picores, urticarias o sensación de quemazón en la zona de contacto.
- Si la chupa, puede necrosarse la lengua: se vuelve de color morado y puede llegar a caerse un trozo.
- Si la toca o la olfatea empezará a babear o rascarse la zona de la boca.
- Si se la come o se la traga el veneno puede producir necrosis en la garganta además de en la lengua y el animal puede llegar a morir.
SÍNTOMAS DEL CONTACTO DE NUESTRO PERRO CON LA PROCESIONARIA:
- Hipersalivación
- Inflamación de la zona de contacto
- Lengua roja, amoratada o negra
- Dolor marcado
- Comportamiento inquieto o nervioso
COMO ACTUAR SI MI PERRO ESTÁ EN CONTACTO CON LA PROCESIONARIA:
1. Lo primero que debemos hacer en caso de que nuestro perro haya estado en contacto con la procesionaria es lavar muy bien la zona afectada con agua TEMPLADA, con el objetivo de neutralizar el efecto de la toxina. En caso que sea necesario, retiraremos previamente la procesionaria, siempre con guantes y sin tocarla. Es MUY IMPORTANTE no frotar ni manipular la zona afectada, ya que estaríamos ayudando a extender la toxina por el cuerpo.
2. En el caso de disponer de inyecciones de Urbason, serán de gran ayuda hasta que lleguemos al veterinario.
3. Acudir cuanto antes al veterinario.